Interprete
Grace Kelly
Grace Patricia Kelly (1929-1982). El 12 de noviembre de 1929, Grace Patricia Kelly nació en Filadelfia, Pensilvania, de padres adinerados. Su niñez transcurrió sin incidentes en su mayor parte, pero una de las cosas que deseaba era convertirse en actriz, cosa que se había decidido a una edad temprana. Después de su graduación de la escuela secundaria en 1947, Grace se puso en marcha por su cuenta y se dirigió a las brillantes luces de Nueva York para probar suerte allí. Grace trabajó como modelo e hizo su debut en Broadway en 1949. También hizo una breve incursión en el medio infantil de la televisión. No contenta con el trabajo en Nueva York, Grace se mudó al sur de California para la parte más prestigiosa de la actuación: las películas
En 1951, apareció en su primera película titulada Catorce horas (1951) cuando tenía 22 años. Fue un papel pequeño, pero un comienzo no obstante. Al año siguiente consiguió el papel de Amy Kane en Solo ante el peligro (1952), un western protagonizado por Gary Cooper y Lloyd Bridges que resultó ser muy popular. En 1953, Grace apareció en una sola película, pero fue otra popular. La película fue Mogambo (1953) donde Grace interpretó a Linda Nordley. La película fue un drama de la jungla en el que los compañeros del reparto, Clark Gable y Ava Gardner, realizaron actuaciones magistrales y por la que fue seleccionada candidata al Oscar, y La angustia de vivir(George Seaton, 1954), por la que finalmente lo obtuvo
Sin embargo, más importante fue su encuentro con Alfred Hitchcock, con quien rodó tres magníficas películas que cambiaron el signo de su carrera: Crimen perfecto (1954), La ventana indiscreta (1954) y Atrapa a un ladrón (1955). Fue durante la presentación en Cannes de esta ultima cuando Grace Kelly conoció al príncipe Rainiero de Mónaco. El romance fue rápidamente conocido, sorprendiendo a la prensa cinematográfica y del corazón. Antes de la boda, aún rodó dos últimas películas, una de profético título, Alta sociedad (Charles Walters, 1956), y la otra de paradójico argumento, El cisne (Charles Vidor, 1956), donde una joven es pretendida por un príncipe a quién renuncia en aras del verdadero amor. Rechazó la posibilidad de volver al cine de la mano de Alfred Hitchock en Marnie la Ladrona porque era impensable que una princesa interpretara a una ladrona frigida con escenas eróticas en brazos de Sean Connery. Cuando se encontraba en la cima de su carrera, se retiró del mundo del cine, a los 26 años, para casarse con el príncipe soberano de Mónaco, con guien tuvo tres hijos: Carolina, Alberto y Estefanía.
En su papel de princesa de Mónaco, ayudo a recuperar la economía del Principado, consiguiendo que aumentara el número de turistas y los ingresos debido a esto y su prestigio como Presidenta de la Cruz Roja. Tiene una estrella propia en el Paseo de la Fama de Hollywood, por su carrera cinematográfica, anterior a convertirse en princesa de Mónaco, está considerada como uno de los mitos de la industria y una de las divas más reconocidas de la historia del cine, además de ser un referente de la moda femenina en su época.